La ciencia y la vida no deberían estar separadas.
"Estoy de acuerdo en que la fe es fundamental para tener éxito en la vida, pero no acepto tu definición de fe, la creencia de que hay vida tras la muerte. En mi opinión, lo único que necesita la fe es el convencimiento de que esforzándonos en hacer lo mejor que podemos nos acercaremos al éxito, y que el éxito de nuestros propósitos, la mejora de la humanidad de hoy y del futuro, merece la pena de conseguirse”. Así se expresaba Rosalind Franklin hacia 1940, cuando tenía solo veinte años, en una carta dirigida a su padre.
Rosalind es la científica con cuyos datos Watson y Crick pudieron formular en 1953 el modelo de doble hélice que describe la estructura del ADN.
Pudiera parecer un agravio la concesión del Premio Nobel sólo a Watson, Crick y Wilkins en 1962, pero en realidad ya se había producido su fallecimiento por cancer de ovario en 1958, debido muy probablemente, a las constantes exposiciones a radiación a las que se vio sometida por su trabajo de investigación..
Esta investigadora merece el lugar que ha llegado a ocupar como icono del avance de las mujeres en la ciencia, por su talento indiscutible y su constancia en el trabajo.
A Rosalind Franklin se la conoce principalmente por la Fotografía 51, imagen del ADN que obtuvo mediante difracción de rayos X ( como se puede apreciar en la imagen superior izquierda ), que sirvió como fundamento para la hipótesis de la estructura doble helicoidal del ADN.